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Miguel Torregrosa Román
24/03/2020
La crisis del famoso coronavirus no se trata de una mera crisis sanitaria, se trata de una crisis económica en toda regla: la maquinaria ha dejado de funcionar.
Ante esta situación, el Gobierno se ha visto abocado a tomar decisiones urgentes, precisas y eficientes, como es el caso de las que afectan a pymes, autónomos y resto de empresas.
El Consejo de Ministros ha aprobado las condiciones de avales que, para asegurar la liquidez de las pymes y autónomos afectos por la crisis del COVID-19, deben cumplir.
En ese sentido, se ha puesto un límite de 20.000 millones de euros para que se puedan disponer de ellos. Estos avales se dirigirán en un 80% para pymes y autónomos, y para el resto de empresas, 70% de los nuevos préstamos concedidos y el 60% para renovaciones.
En consecuencia, estos avales podrán ser solicitados por las empresas y autónomos que se hayan visto afectados por los efectos económicos del coronavirus, siempre y cuando los que lo soliciten no se encuentren en situación de morosidad a fecha 31 de diciembre de 2019 y en un procedimiento concursal a fecha 17 de marzo de 2020. Asimismo, y como hemos citado con anterioridad, tendrán carácter retroactivo y se podrán solicitar para operaciones realizadas con posterioridad a la entrada en vigor del Real Decreto-ley 8/2020, de 18 de marzo. El aval emitido tendrá una vigencia igual al préstamo concedido y un plazo máximo de 5 años. Los solicitantes de estos avales tienen como fecha límite hasta 30 de septiembre de 2020.
Muchos os preguntaréis, ¿dónde acudo para solicitarlo?
Pues bien, deben dirigirse a las diferentes entidades financieras con las que el ICO haya suscrito los acuerdos de colaboración. Debemos indicar que, el coste del aval será asumido por las entidades financieras.
